Fiesta con truco: OCU denuncia a 8 festivales al aire libre por malas prácticas

a Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha presentado denuncias ante las autoridades de consumo de varias comunidades autónomas por las irregularidades detectadas en ocho festivales de música al aire libre: Degusta Fest (Granada), Icónica Fest (Sevilla), Bella Festival (Marbella), Boombastic Costa del Sol (Málaga), FIB (Benicàssim), Movida Sound (Barbate), Dreambeach (Almería) y Reggaetón Millennial Fest (Alicante). Según la organización, estas prácticas podrían haber afectado a más de 400.000 asistentes.
Una de las quejas más comunes es el cobro de una comisión de entre 2 y 3 euros para recuperar el dinero no gastado en la pulsera cashless, sistema de pago obligatorio que además restringe el uso de efectivo. En muchos casos, el plazo para reclamar la devolución del saldo es de apenas unos días.
Otra práctica cuestionada es el recargo por salir y volver a entrar al recinto, con importes que pueden llegar hasta los 35 euros, sin que exista un servicio adicional que lo justifique, ya que el control de aforo corresponde a la organización. Según OCU, esto podría considerarse incluso una retención indebida.
También se señala como abusiva la negativa a devolver el importe de la entrada en casos de mal tiempo o cambios en el cartel, a pesar de que la presencia de determinados artistas es precisamente el motivo principal por el que los asistentes adquieren la entrada.
Aunque en 2024 se ha detectado con menor frecuencia, sigue siendo criticable la prohibición de acceder con comida o bebida del exterior. A pesar de que algunas normativas autonómicas lo permiten, OCU defiende que se trata de una medida desproporcionada, dado que la finalidad de estos eventos es cultural y musical, no gastronómica.
Ante estas situaciones, la organización reclama a las autoridades autonómicas que actúen con sanciones y obliguen a las promotoras a devolver los importes cobrados de manera indebida. Al mismo tiempo, considera necesaria una regulación estatal uniforme que proteja los derechos de los asistentes y establezca compensaciones automáticas en caso de abusos. Actualmente, salvo en Asturias, la legislación regional resulta demasiado laxa y favorable a los intereses de los organizadores.
Mientras tanto, OCU anima a los asistentes afectados a solicitar la hoja de reclamaciones, y si esta no se facilita, a requerir la presencia de la policía local. Además, recuerda que si un festival se suspende o se modifica el cartel a última hora, los consumidores no solo tienen derecho al reembolso de la entrada, sino que pueden reclamar daños y perjuicios relacionados con gastos añadidos como transporte o alojamiento.