Ante las denuncias presentadas por el grupo de alumnos del IES Pueblos de La Villa de Fuente Álamo, al que se les privó del acceso a la discoteca Trips de La Manga, y el cariz que han tomado los acontecimiento llegando, incluso, a solicitarse explicaciones en la Asamblea Regional al consejero de Presidencia; la dirección de la empresa se ha visto obligada a emitir un comunicado de prensa donde, efectivamente, corroboran que no se les dejó pasar argumentando que los jóvenes marroquies usaron «formas amenazantes» en la entrada a la discoteca.
«Al solicitar a los otros tres jóvenes que se detuvieran y esperasen -añade el comunicado-, algo usual en este proceso, éstos increparon al responsable de acceso y se expresaron de forma amenazante, por lo que el citado responsable resolvió impedirles la entrada».
Según la discoteca este procedimiento es el habitual cuando «tiene lugar una falta de respeto, amenaza o actitud desafiante», sin que haya influido en modo alguno, razón de sexo, raza o religión.
«Cada noche, personas de todo tipo de etnias y condición disfrutan en nuestras instalaciones sin ser discriminadas en forma alguna, ya que de hecho, entre nuestros empleados se da esa misma circunstancia».
Trips considera que se está usando el móvil del racismo «de forma injustificada sin observar ya no, la presunción de inocencia, si no tampoco, el perjuicio que se genera a Trips».
El escueto comunicado finaliza manifestando su absoluto respeto por todas las culturas y confesiones «y de hecho -añade- cientos de marroquíes de todo el Campo de Cartagena acuden a nuestro local semanalmente».
La discoteca Trips recuerda que su propietario, Alfonso Torres, lleva años implicado en proyectos de ayuda al desarrollo en países musulmanes «habiendo sido distinguido con varios reconocimientos que acreditan su compromiso con esta cultura».
