Es una situación que se hace insoportable. Y bastante. Empresarios, vecinos y turistas no saben qué hacer ni cómo evitarlo pero lo que sí es evidente que no tiene a nadie contento, a pesar de la opinión de los agricultores quienes tampoco encuentran otra solución. Las poblaciones de Los Nietos, Islas Menores, Mar de Cristal, Playa Paraíso, Playa Honda, Los Belones, Cabo de Palos y La Manga llevan más de una semana soportando los malos olores y sobre todo una plaga de moscas que no deja indiferente a nadie. No pican, no suponen ningún riesgo para la salud, pero molestan.
Los más perjudicados han sido los empresarios, que han visto como las terrazas de los restaurante de Los Belones, pueblo tradicionalmente hostelero, se han quedado vacías. Era totalmente imposible estar más de diez minutos sin soportar el terrible zumbido de los insectos y sin atacar tu comida. Los empresarios y residentes están molestos ya que las quejas vienen del abono orgánico que utilizan los agricultores para preparar las tierras para la siguiente cosecha, fundamentalmente de lechuga de los campos que rodean las poblaciones que van desde Los Nietos hasta La Manga. Las lluvias que cayeron el domingo por la noche y el martes tampoco han mejorado la situación ya que tradicionalmente con la bajada de temperaturas, el insecto reduce su población. La lluvia estaba en las calles, pero las moscas seguían llenas de moscas.
“No tiene solución y creemos que viene de los campos cercanos a Los Belones, cerca de Los Nietos. Es una locura y sólo tienes que acercarte a un contenedor de basura para verlo. La zona de Las Barracas está infectada. No se puede comer en la calle y lleva varios días molestando a los vecinos. Sólo queda resignación, no hay otra como siempre pasa en esta zona”, explica el presidente de la Asociación de Vecinos de Los Belones. Mariano Almagro.
Esta situación ya pasó antes del verano, cuando se dejaron en algunas plantaciones enteras de melones sin recoger y causó una plaga de moscas muy molesta antes de la campaña turística de la zona. Los agricultores aseguran que esta situación suele producirse a principios del verano con la subida de las temperaturas ya que el desarrollo de las moscas se hace más rápido si la temperatura también crece. El estiércol que utilizan los agricultores suele llevar larvas de moscas ya que la temperatura interna del abono se mantiene cálida. La mayoría de moscas adultas se quedan cerca de los lugares de reproducción por lo que no suelen dispersarse a más de dos o tres kilómetros y por eso los vecinos de la zona señalan a los campos cercanos a sus viviendas.
