El 5 de diciembre de 1972 el promotor entrega al topógrafo Bartolomé Díaz un documento interno donde esboza la distribución de volúmenes que deberá tener la construcción de la urbanización “El Pedrucho”, catalogada como “Proyecto 626” en los documentos internos en Maestre.
En este diseño inicial aparecían proyectadas un total de 389 casas, un local comercial, fonda y club náutico:
“Las instalaciones náutico-deportivas se construirán –añade Maestre en el informe original- en el momento en que las dos partes acuerden como más oportuno para favorecer las operaciones de venta y aunque su finalidad es favorecer las ventas para dar servicio al poblado, con cuyos futuros propietarios o inquilinos se podrán establecer abonos anuales o temporales, según los casos, entendemos que deben ser establecimientos abiertos al público para poder venderlos (bar, restaurante, instalaciones de playa, etc.) y hacer más económico el mantenimiento de los servicios a los pobladores”.
Tomás Maestre deja bien claro en este informe previo que la obra “deberá ser extremadamente confortable y de primera calidad en sus interiores y de magnífica terminación externa, dentro de su aire rústico”.
El encargado de la coordinación de ventas sería su hermano Jesús Maestre Aznar y se asignó la dirección de las obras a los arquitectos José Luis Sanz Magallón y Juan José Ligues y Creus firmándose el contrato el 5 de enero de 1973 entre Parcemenor y Joaquín Sebares Acebal.
Según un plano manuscrito fechado el 20 de febrero de 1971 Antoni Bonet y José Puig tenían en los terrenos a urbanizar dos solares de 29.075m2 y 4.190m2, respectivamente.
Otros propietarios eran los aristócratas hermanos Andrés y Carlos de Cendra.
El 23 de ese mismo mes Maestre aclaraba en otra nota interna: “Se ha distribuido en cuatro zonas. Las del Norte y Sur destinadas a edificios en altura y las centrales, una donde irá ubicado el Club Náutico y otra, donde se construirá el poblado de pescadores, base de chalets de dos y tres plantas. Esta zona del poblado va a su vez subdividido en cuatro fases tan solo a efectos de programación de las obras”.
