Hace unos días, la CARM anunciaba la implementación de un nuevo sistema de señalética digital inteligente que hace accesible la atención al público de la Administración a personas con discapacidad auditiva y visual, siendo Navilens un proyecto reconocido en esta última.
En lo que respecta a la discapacidad auditiva, la cosa hace aguas.
Según la información, la solución para las personas sordas es el bucle magnético, el sonido limpio, su amplificación y esas cosas la paranormales, con el fin de que nuestros oídos y cerebros, vagos rematados por lo demás, oigan. Es esencial que para poder comunicarnos con el personal de la Administración que atiende al público, recuperemos de una vez la audición.
La adaptación de este personal al sordo no se sabe cuál es, en cualquier caso, es lo de menos, porque gracias a la tecnología, el sordo ya oye.
No voy a entrar en el campo de otra discapacidad, pero la que a mí me toca ¿qué me están contando? Duele decir que las personas sordas seguimos excluidas y ninguneadas. El día del evento, ninguna persona sorda en la foto. De haberla oculta, flaco favor hizo a nuestra comunidad. Se comprende que las personas sordas somos poco dóciles, no sea que digamos alto y claro que se dejen de milagros e implantes y nos expliquen dónde está la adaptación que venimos solicitando desde que supimos de nuestra sordera irreversible, que no es otra que la presencia de ILSEs o de personal de atención al público formado en LSE, o incluso de pantallas con textos a tiempo real, para atender a personas sordas y no a falsos oyentes.
Pero claro, ¿cómo tener una adaptación correcta si no se cuenta con los doctorados en incomunicación? ¿cómo atinar si van asociaciones, padres y madres, pseudosensibilizados, tecnólogos y demás, todos ellos oyentes?
Como en otra dimensión, en un universo paralelo, la señalética esta lleva el sonido limpio a la prótesis. ¡Prótesis! tres veces lo leí, sí. Según oyentes, somos protésicos. Porque claro, las prótesis mentales no se ven. Resulta que hay personas sordas que no llevan implante coclear porque son personas sordas en el mundo real y de nada les sirve. Lo digo yo que soy sorda profunda oralista y signante con mi cabeza intacta y sin ocurrencias auditivas.
Y van a poner una acústica que ríete de la NASA, pues mira qué bien para los que de verdad son protésicos.
