Denuncian que el 112 ni Protección Civil atendieron a una niña herida

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Efectivos de Protección Civil Cartagena durante un simulacro (imagen de archivo).
Efectivos de Protección Civil Cartagena durante un simulacro (imagen de archivo). / AYTO CARTAGENA

Todos se quedaron con la boca abierta e indignados. Si en ocasiones hay historias donde la realidad supera la ficción lo que ocurrió ayer a una niña y su familia en una playa de La Manga del Mar Menor podría incluirse en esta frase. Vecinos, empresarios y turistas denunciaron ayer viernes que tanto miembros de Protección Civil como del 1-1-2 no quisieron atender a una niña con una brecha en la cabeza.

Los hechos ocurrieron ayer a mediodía en la Cala del Turco, cerca del Club Náutico Dos Mares. Una menor, de unos 3 o 4 años de edad, jugaba con su familia en la arena cuando se hizo una brecha en la cabeza. Inmediatamente, acudieron al Chiringuito El Golleron, donde recibió primeros auxilios y llamaron a emergencias para que fuera atendida. No se esperaban la respuesta de emergencias mientras pasaba los minutos. La niña permanecía acostada mientras sangraba abundantemente. Sus padres le apretaban la herida y la intentaban calmar.

“Llamé al 1-1-2 y me dijeron que acudiera al centro de salud más cercano. Llamé otros chiringuitos cercanos para que mis compañeros avisaran a los de Protección Civil para que acudieran a atender a la pequeña. No respondieron. Menos mal que tenemos un botiquín, porque si no hubiera sido peor porque la niña no paraba se sangrar y había que atenderla rápido“, denuncia Pepe Cegarra, gerente del chiringuito El Gollerón.

Finalmente los padres tomaron la decisión de coger en brazos a la niña y acudir al centro de salud de La Manga debido a la demora de las autoridades sanitarias en acudir al lugar. El padre la cogió en brazos y tuvo que recorrer más de doscientos metros y solventar un desnivel antes de subirla al coche.

“Es indignante que te traten así. Podía haber ocurrido una desgracia y no se entiende como no han querido atender a una niña que tenía la cara llena de sangre y que estábamos pidiendo su ayuda”, se quejó el empresario Cegarra.