El titular de la Consejería de Fomento e Infraestructuras, Francisco Bernabé, acompañado por el alcalde de San Javier, José Miguel Luengo, mantuvo ayer un encuentro con una representación del tejido empresarial del municipio para explicarles las actuaciones que se van a llevar a cabo con el dinero destinado por la UE para la ITI del Mar Menor.
El consejero volvió a insistir en que “el Mar Menor es uno de los tres lugares de España escogidos por Europa como foco de especial atracción y de inversión preferente para realizar una serie de medidas y actuaciones en materia medioambiental, náutica, transportes y turística que van a permitir impulsar todos los atractivos de este enclave único en Europa” pero, dejando claro, que la estrategia diseñada y el dinero invertido se dirigirá fundamentalmente «a garantizar una mayor calidad del agua del Mar Menor”.
Para ello, señaló Bernabé, se trabajará principalmente en la eliminación los vertidos con una red de tanques de tormenta para recoger las escorrentías de las lluvias y poner fin a los vertidos agrícolas de la Rambla del Albujón.
El «enorme factor turístico» del Mar Menor vendrá después, cuando la laguna recupere la calidad que se merece. Será entonces cuando se vea la utilidad de, por ejemplo, la eliminación de fondeos ilegales «así como otras para el impulso del transporte y la movilidad —señala Fomento— a través de paseos marítimos, carriles bici o más medios de transporte».
De esta forma el consejero matiza enormemente el destino final de los fondos obligado por una estricta normativa de la UE para la recepción de una ITI que se debe usar, fundamentalmente, para lograr un desarrollo sostenible a través de la preservación medioambiental de la laguna.
Entre los asistentes destacaron las asociaciones de comerciantes Único, San Javier ciudad de compras, la asociación de Hostelería del Mar Menor (Hostemar), el Centro Comercial Dos Mares, el supermercado Eroski y otras empresas destinadas a actividades comerciales, náuticas y de construcción. Este encuentro se enmarca en una ronda de contactos con todos los sectores y agentes implicados en el desarrollo de la laguna salada con el fin de informar de las iniciativas encaminadas a favorecer el desarrollo sostenible de la laguna.
Bernabé, por último, anunció la posibilidad de lograr un aumento en la partida inicial de cuarenta y cinco millones de euros prevista por la UE «en función de los últimos compromisos contraídos en Bruselas con autoridades de las instituciones comunitarias”.
